Ilustración por Diego Martínez García

Ilustración por Diego Martínez García

domingo, 24 de marzo de 2013

Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia





Si bien las prohibiciones se instalaron en todos los frentes, hubo un espacio que el ojo del censor vigiló con firmeza: el de la literatura infantil. 

Los militares se sentían en la obligación moral de preservar a la niñez de aquellos libros que —a su entender— ponían en cuestión valores sagrados como la Familia, la Religión o la Patria. Gran parte de ese control era ejercido a través de la escuela, tal como demuestran las instrucciones de la "Operación Claridad" (firmadas por el jefe del Estado Mayor del Ejército, Roberto Viola), ideadas para detectar y secuestrar bibliografía marxista e identificar a los docentes que aconsejaban libros subversivos.

Los invitamos a leer algunos fragmentos del fascículo Un golpe a los libros (1976-1983): Los libros infantiles prohibidos por la dictadura militar en Argentina

Por Paula M.